Somos trabajadores que movemos mercancía de Walmart en un almacén privado en Chino, California. Hace solo un par de semanas, el estado de California ordenó al propietario del almacén que nos devolviera más de $1 millones en salarios robados. El Comisionado Laboral de California determinó que el operador del almacén, Quetico LLC, había reducido nuestros cheques de pago y los de más de 800 trabajadores.
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Estamos muy contentos de que se haya hecho justicia, pero seguimos arriesgando nuestros trabajos solo porque hicimos sonar el silbato. La compañía niega haber hecho algo malo y apela el fallo del estado. Mientras tanto, nos preocupan las represalias y la pérdida de nuestros trabajos. No sabemos si nos despedirán. Walmart no ha hecho nada.
Firma nuestra petición a Walmart.
“Seguiremos en esta lucha y no permitiremos represalias. Queremos un cambio”.
Diana León
“Nosotros los trabajadores fuimos afectados y es importante que hablemos sobre estos abusos”.
Abraham Guzmán
